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¡Bienvenido a Aromacosmética! Soy biólogo y especialista en química cosmética con una amplia trayectoria en formulación natural y aromaterapia científica. Durante años he profundizado en el estudio de los aceites esenciales y la cosmética natural, desde la perfumería hasta la dermocosmética. Aquí aprenderás a crear fórmulas efectivas con ingredientes puros. Descubre, aprende y transforma tu rutina con lo mejor de la naturaleza.

martes, 9 de abril de 2024

 

Índices finales de la calculadora.Segunda parte

Acondicionado

Capacidad que tiene el jabón de suavizar y nutrir la piel y el pelo. Estos aceites son los que contienen los ácidos grasos siguientes (los más comunes):

·         Poliinsaturados linoleico y linolénico

·         Monoinsaturados, oleico, ricinoleico

·         Sobre todo, el ácido graso monoinsaturado gadoleico (jojoba)

El aceite vegetal de cáñamo, jojoba y las ceras de abeja y carnaúba aumentan mucho el acondicionado. La lanolina también la aumenta mucho.

Esta propiedad es inversamente proporcional a la limpieza, es decir a mayor acondicionado, menos limpieza, o, al contrario.

Para pieles secas y sensibles, es mucho mejor que el valor del acondicionado tenga un punto o dos superiores al de limpieza. El motivo es que, si nuestra piel es seca y nos aplicamos un jabón con mucho poder de limpieza, consigue arrastrar con más eficiencia la grasa y evidentemente a una piel seca no le interesa

Limpieza o capacidad detergente

Como ya indica su palabra, es cuanto de eficaz es en arrastrar la suciedad. A mayor poder detergente, más seca la piel, ya que arrastra consigo la grasa del manto hidrolipídico. Estos aceites son los que contienen los ácidos grasos siguientes (los más comunes):

·          caprílico, laúrico y mirístico

Esta propiedad es inversamente proporcional al acondicionado, es decir a mayor limpieza menos suave y nutriente, o, al contrario.

Las pieles grasas, podrían aguantar una mayor limpieza que acondicionamiento.

Burbujas

Es la cantidad de burbujas que proporciona. Esto no se traduce en mayor limpieza, solo en la cantidad de burbujas. Estos aceites son los que contienen los ácidos grasos siguientes (los más comunes):

·          caprílico, laúrico y mirístico y en menor proporción el oleico

Persistencia de la espuma

Determina cuanto de duradera es la espuma que produce y su consistencia cremosa. Una persistencia alta, hace que los jabones aclaren menos. Estos aceites son los que contienen los ácidos grasos siguientes (los más comunes):

·         palmítico y esteárico

Dureza

Esta variable no genera dudas, su propio nombre indica de que se trata. Estos aceites son los que contienen los ácidos grasos siguientes (los más comunes):

·         palmítico y esteárico y en menor proporción oleico y ricinoleico

Solubilidad

La solubilidad es la capacidad que posee una sustancia para poder disolverse en otra. Por tanto, en este caso, ser refiere a la facilidad de un jabón en deshacerse en agua:

·         Índice alto, el jabón tiende a gastarse pronto

·         Índice bajo, necesita más fricción para producir espuma, es decir se gasta menos que el caso anterior

Los ácidos grasos que más aumentan este valor son:

Ácido graso ricinoleico, y en menor medida Ácido Linolélico y linoleico

El ácido graso que más disminuyen este valor es:

Secado

Hace referencia a la capacidad que tiene un jabón de perder su humedad. El secado es justamente lo contrario a “baboso”:

·         Índice alto, el jabón se resquebraja

·         Índice bajo, tienden a ponerse viscosos

No es imprescindible saber de memoria como afectan las diferentes grasas a las características del jabón, sin embargo, si que considero importante, tener una idea genérica, ya que nos ayudará a conseguir jabones que cumplan nuestros con nuestros requisitos.

Conociendo estos conceptos, podremos ajustar más rápido y eficientemente, los valores de los índices para conseguir nuestro jabón.

Consejo para conocer los índices de cada grasa

Una buena forma de saber que características aporta una determinada grasa, es poner una cantidad cualquiera en la calculadora y observar sus índices. De esta forma, sabremos cómo se comporta una determinada grasa y que aporta al jabón.

Si queremos comparar las grasas entre ellas, solo tendremos que poner la misma cantidad de gramos en la calculadora, de forma aislada de cada grasa y comparar sus índices.

Como resumen:

·         Pieles secas y sensibles: Menor limpieza y mayor acondicionado, y mayor sobreengrasado

·         Pieles grasas: La limpieza puede ser mayor que el acondicionad y menor sobreengrasado

·         Jabones para lavado ropa: Mayor limpieza-sobreengrasado valor 0

 

Índices finales de la calculadora. Primera parte

Los siguientes valores, se encuentran al final de la calculadora. Todos tienen un valor numérico ideal cercano al 50. Esto solo es un valor estándar, ya que, si nosotros buscamos reforzar algunas de las cualidades del jabón, podemos retocar nuestra fórmula para conseguir enfatizar aquella característica buscada o por el contrario rebajarla.

Es decir, perfectamente podemos tener valores por encima o por debajo de 50, siempre y cuando sepamos como afecta ese cambio.

Así puede apetecernos hacer un jabón más limpiador, más suave, más espumoso, más duro o blando. A lo mejor buscas un jabón muy hidratante, para eso necesitas un acondicionado por encima de 50 y/o que el acondicionado sea superior a la limpieza… Y así con infinidad de variables.

Pero para ser rigurosos, tampoco es conveniente alejarse mucho de este valor.

Pero antes, voy a hacer una relación entre los ácidos grasos que se mencionaran y el aceite vegetal que los contiene, ya que los índices que veremos a continuación hacen referencia a ácidos grasos y no a los aceites vegetales.

1-Insaturados (los que más fácilmente se oxidan (enrancian)

·         Monoinsaturado

o   Ácido graso ricinoleico: Ricino

o   Ácido graso oleico: Oliva, frutos secos, cártamo, aguacate, avellana, manteca karité

(es el ácido graso más abundante entre los A.V insaturados)

o   Ácido graso gadoleico: Jojoba 

·         Polinsaturado (los que más se oxidan)

o   Ácido graso linoleico: Cáñamo, Onagra, arroz, maíz, uva, girasol, soja, zanahoria, rosa mosqueta

o   Ácido Linolélico: graso Lino, rosa mosqueta, cáñamo, espino, borraja, onagra, cáñamo

2-Saturados

o   Ácido graso Láurico: Coco, palma, babassú

o   Ácido graso mirístico: Coco, palma

o   Ácido graso caprílico: Coco, palmiste

o   Ácido graso palmítico y esteárico: Palma, cera de abeja

o   Ácido esteárico: manteca de cacao, manteca de karité

 

SOBREENGRASADO

Consiste en dejar una pequeña parte del aceite sin saponificar, es decir sin reaccionar con la sosa, dicho de otra forma, se trata de incorporar menos cantidad de sosa de la necesaria para una saponificación completa.

En la calculadora, lo que observaremos, es que:

·         Subimos sobreengrasado: Baja la cantidad de sosa

·         Disminuimos el sobreengrasado: Aumenta la cantidad de sosa

Lo primero es tener claro el destino de nuestro jabón:

·         Para piel: Nos interesa aplicar un sobreengrasado para que el jabón sea más emoliente

o   Piel grasa: Un sobreengrasado sobre 5% es el más adecuado

o   Pieles normales: Un sobreengrasado sobre 8% es el más adecuado

o   Pieles secas/sensibles: Un sobreengrasado sobre 8-10% es el más adecuado

·     Para lavar la ropa: Nos interesa que todo el aceite se convierta en jabón, precisamente para que tenga mayor poder de detergencia (limpieza). Por consiguiente, no interesa tener sobreengrasado, valor 0. Es decir, una saponificación completa de todas las grasas.

Nota: No aconsejo un sobreengrasado superior a 10%, ya que es muy probable que se produzca oxidación de las grasas. En sobreengrasado a partir de 8%, recomiendo incorporar a la fórmula 1% de Vit E, para evitar el enranciamiento del/los aceites del sobreengrasado. 

Como hacer el sobreengrasado. Dos formas

A-Un sobreengrasado general

Pondremos el porcentaje deseado de sobreengrasado y bajará la cantidad general de sosa. Por tanto, si aplicamos un 8% de sobreengrasado, del total de los aceites de nuestra fórmula, el 8%, no saponificará.

 B-Un sobreengrasado de un aceite concreto

En la calculadora añadir la cantidad de aceite o grasa que queremos aplicar el sobreengrasado hasta que nos índice el % que nos interese, ya sabemos desde 5-10%.

Cuando tengamos la cantidad que nos corresponde de ese sobreengrasado, la reservaremos, para añadirla más adelante en la traza, ya que así en su mayor parte no se saponificará, consiguiendo nuestro sobreengrasado de nuestro aceite en concreto.

 

Concentración de la lejía

Cuando hablamos de concentración, lo estamos haciendo sobre la cantidad de agua que lleva un jabón, es decir, cuando tocamos este índice, solo cambia la cantidad de agua. En realidad, hablamos de la concentración de la lejía que se forma al mezclar la sosa (o la potasa) cáustica con el agua.  Esto es importante porque determinará:

·         La cantidad de agua que quedará en el jabón una vez finalizado y el tiempo de secado de éste.

·         La velocidad para alcanzar la traza que en algunas técnicas es importante para poder realizar ciertos acabados.

Concentración y Proporción de la lejía

Así una concentración del 50% indica que, en la lejía, la mitad del peso es agua y la otra es álcali. Una lejía del 33% de concentración, tiene el 33% de álcali diluido en el 67% de agua. Es decir 2 veces más de agua que de álcali. Un 25% tiene 3 veces más de agua que de álcali y así para todos los porcentajes posibles.

Implícitamente en esta explicación estamos hablando también de proporción que es otra forma de determinar la cantidad de agua. Si hablamos del 50% estamos diciendo que la proporción es de 1:1, si es del 33% es de 1:2 y si hablamos del 25% es de 1:3, dónde se indica que por cada parte de álcali (primer término) hay otras partes de agua (segundo término)

Cuando modificamos la concentración, solo variamos la cantidad de agua. La cantidad de sosa que indica la calculadora, debe de permanecer constante, ya que es la que la que necesita para saponificar las grasas de nuestra mezcla.

·         Valores más bajos de concentración, mayor cantidad de agua.

·         Valores más altos de concentración, menor cantidad de agua

Según el tipo de grasa:

·         Cuando la mezcla de aceites tiene un predominio de aceites blandos, conviene que la concentración sea mayor

·         Cuando la mezcla de aceites tiene un predominio de aceites duros, conviene que la concentración sea menor

Esto no es normativo, solo es un consejo basado en resultados que funcionan. Pero, perfectamente podemos incumplir lo anterior si buscamos algún otro tipo de resultados.

Como afecta a la traza la concentración

·         A menor concentración de la lejía, más se tarda en alcanzar la traza

·         A mayor concentración de lejía antes se consigue traza

Es importante saber cómo afecta la concentración a la traza , ya que, si queremos, jabones con aditivos (colores, aromas…etc), necesitamos una traza más lenta, y por tanto una concentración menor.

Por tanto, este valor va estar ligado a la dureza del jabón. Un buen valor de referencia seria entre el 26-28, si predominan aceites duros (en caso contrario trazará muy rápido), y aumentarla, sobre 30-32 si lo que predominan son aceites blandos.

Consejo para jabones con colorantes: Se buscan grasas que tengan colores claros, para que el colorante sea más vistoso. Estas grasas son: Palma, ricino, almendras, coco, y la manteca karité desodorizada y manteca de cerdo. Justo estas grasas llegan rápido a la traza, por tanto, si queremos colorear nuestro jabón, tendremos que trabajar con concentraciones bajas, entorno al 26-28%.


Valor yodo y valor INS calculadora saponficación 

 El índice de yodo (IY) expresa la cantidad de yodo que absorbe un compuesto, va en función de la insaturación del mimo. Esto significa que cuanto más alto sea este índice más posibilidades tiene el aceite de oxidarse.

Nos indica la relación entre aceites vegetales insaturados y saturados que estamos utilizando, es decir, es un indicativo del equilibrio que tenemos en nuestra fórmula.

En concreto nos informa de la posibilidad de su enranciamiento, dicho de otra forma, predice la caducidad del jabón, de forma que:

 

·         Índice yodo más altos: mayor concentración de grasas insaturadas, antes se enrancia el jabón. Debido a que estas grasas se oxidan antes

·         Índice yodo más bajos: mayor concentración de grasas saturadas, más tarda en enranciarse el jabón. Debido a que estas grasas tardan más en oxidarse. Por tanto, este tipo de aceites son más estables.

Por lo tanto, para que nuestro jabón duré más tiempo, no es conveniente abusar de aceites con un IY alto, es decir insaturados.

Hay que procurar que no pase de 70. En climas cálidos y húmedos procurar que no supere los 60.

Valor Ins (el valor menos determinante)

Determina la compatibilidad de una grasa con el jabón. Se mide en función del valor de SAP y el yodo.

Se calcula restando el valor SAP (de kOH) al IY, unos ejemplos:

·         Aceite de coco tiene un valor SAP de 258 y un valor IY de 10, calculamos 258-10=248; luego su valor INS es de 248

·         Palma es 199-53=146

·         Aceite de oliva es 190-84=106

·         Girasol es 189-133=56

Se establece que un buen equilibrio ronda los 140-160.  

Así que dentro de estos márgenes:

·         Cuanto más bajo: más blando y más propenso al enranciamiento

·         Cuanto más alto: más duro, limpiador, menos soluble y menor capacidad de enranciarse

Reacción de saponificación: el milagro de la conversión, de la grasa al jabón

Para entender cómo se llega a una pastilla de jabón, es imprescindible conocer el proceso químico que tiene lugar para su formación.  La reacción química que ocurre para la formación del jabón se denomina SAPONIFICACION.

Químicamente, cuando un ácido y una base se combinan forman una sal. En la fabricación de jabón en proceso en frío, los triacilglicéridos (componentes de las grasas) que son ligeramente ácidos, reaccionan con el hidróxido de sodio, que es altamente básico y producen un jabón suave que es una sal ligeramente básica. De hecho, la definición habitual de jabón que podemos encontrar en el diccionario es: “la sal de un ácido graso y un metal (NaOH).

El término sal no solo se refiere a los precipitados que se encuentran en los océanos y mares, lo que conocemos comúnmente por cloruro sódico. Químicamente una sal es el compuesto que se forma cuando un metal sustituye al hidrógeno de un ácido. El metal (el sodio que contiene el hidróxido de sodio), sustituye al hidrógeno del ácido graso de la grasa para crear el jabón, que químicamente es una sal.

 

Proceso de saponificación.

La química de la fabricación de jabones se compone de dos procesos diferentes:

 A) la descomposición de sus ingredientes en sus partes útiles y reaccionantes

 B) la reacción de las partes útiles para formar el jabón

A-La descomposición de sus ingredientes se divide a su vez en dos subprocesos: 1-descomposición de las grasas en ácidos grasos y 2-la descomposición del hidróxido de sodio, que da como resultado iones de hidróxido y iones de sodio.

 

  Las grasas se componen de triglicéridos, pero no se puede hacer jabón a partir de estos. Para ello se deben descomponer los triacilglicéridos en sus partes útiles: ácidos grasos y glicerol. 

Los ácidos grasos son indispensables para la formación de jabón, el glicerol no, pero tiene su utilidad, como explicaré más adelante. Este proceso de descomposición de los triacilglicéridos en ácidos grasos y glicerol recibe el nombre de hidrólisis. En este proceso también es necesario el hidróxido de sodio como comenté antes. La descomposición del hidróxido de sodio en iones de hidróxido e iones de sodio recibe el nombre de ionización.

El agua como solución alcalina es básica en estos procesos, hidrólisis y ionización, es donde tiene lugar la descomposición de los triacilglicéridos y la ionización, es decir es el medio donde reaccionan.

B-La reacción de las partes útiles consiste en realidad en dos reacciones: 1- la reacción de los ácidos grasos y los iones de sodio, que produce jabón y 2- la reacción del glicerol con el ion de hidróxido, que produce glicerina.

  


 La unión de estos dos procesos, la descomposición de los ingredientes en sus partes útiles y la reacción de éstas para producir jabón, conforma el proceso de saponificación.


Se puede apreciar como reactivos, los ácidos grasos, el metal del hidróxido de sodio y como productos la glicerina y el jabón



sábado, 6 de abril de 2024

 

Astringente

Los astringentes son productos para el cuidado de la piel a base de agua que suelen contener alcohol. Cuando se aplican en el rostro, provocan el estrechamiento o contracción de los tejidos blandos (células), lo que a su vez limpia la piel, reduce el exceso de grasa y reduce el aspecto de los poros dilatados. Por estas razones, a menudo se recomiendan astringentes para las pieles grasas.

El astringente, que se utiliza como segundo paso después de la limpieza en el ritual diario del cuidado de la piel, es esencialmente un limpiador más fuerte y potente. Los astringentes eliminan el exceso de grasa, maquillaje y suciedad que el limpiador pueda haber pasado por alto, al tiempo que reducen el aspecto de los poros dilatados.

Como pueden resecar la piel, suelen recomendarse a quienes tienen la piel grasa o propensa al acné, pero no se aconsejan a quienes la tienen sensible.

El Tónico Astringente es una loción fresca que hidrata, calma y ayuda a secar los granitos.

A modo general, funciones distribuidas en los distintos tipos de productos:

       Tónicos: Normalmente sólo contendrán humectantes, pero también pueden contener emolientes.

      Sérums: Si tienen agua, pueden contener únicamente Humectantes, pero también Emolientes y Oclusivos. Otros, sin agua, contienen exclusivamente Emolientes y/u oclusivos

    Cremas: Lo más común es que contengan Humectantes, Emolientes y Oclusivos. Otras opciones son que sólo contengan Humectantes (gel creams sin aceites) u otras combinaciones

Los preparados acuosos no oclusivos, como leches y cremas, están indicados en lesiones húmedas, inflamadas o con vesiculación.

Los más grasos, como pomadas y ungüentos, se recomiendan en lesiones crónicas secas con costras y fisuras, para favorecer la rehidratación de la zona.

Oclusivo

Es un ingrediente, que muestra la capacidad de formar una película o film protector sobre la piel que permanece sobre ella un tiempo determinado e impide que ésta pierda agua por evaporación, así se evita la deshidratación, ayudando al manto hidrolipídico hacer su función.

Recomendado en cremas para zonas con mucha sequedad, como los codos, talones, manos y también es ideal para pieles sensibles que normalmente están más desprotegidas.

En cosmética natural sobre todo hay dos productos con mayor poder oclusivo:

·         Ceras: Mayor poder oclusivo

·         Mantecas: Menor poder oclusivo (ácidos grasos saturados)

De este modo, los oclusivos ayudan a que el estrato córneo se hidrate con la propia agua corporal procedente de capas más profundas de la piel. Normalmente, son solubles en aceites.

Cuando se usa un producto oclusivo no fija a la piel de forma permanente, ya que con el roce de la ropa, de la propia piel, se va desprendiendo con el tiempo, es importante entender que no taponan los poros (es falso), ni impiden la transpiración de la piel. Un producto oclusivo, no tiene porque ser comedogénico.

Es decir, los productos emolientes mantienen un buen estado de la capa cornea para que sea más eficiente evitando mayor pérdida de agua, y un producto oclusivo evita la pérdida de agua al formar una película o barrea protectora.

 

 

Estas imágenes, aclaran los conceptos de emoliente y oclusión. El tejado en mal estado no aísla y por tanto se tendría que reparar, tal y como haría un producto emoliente en la piel (cementación de los corneocitos). Por otra parte, un techo con aislante evita la perdida de calor igual que haría un producto oclusivo en la piel con el agua.

 Algunos productos con poder de oclusión:

 
        Con origen animal: lanolina y ceras

      Con origen vegetal: aceites y mantecas vegetales, como la manteca de karité o el aceite de aguacate, y aceites semisintéticos 

 Con origen mineral: Petrolatum, Paraffinum Liquidum, Mineral Oil… Así como diferentes siliconas.

  

 

Emoliente

Sustancia que suaviza, ablanda y aumenta el grado de humedad de la piel. Esta característica la tienen sobre todo los lípidos, en concreto los A.V y mantecas.

Igual que ocurre con nuestro sebo natural, los ácidos grasos de los AV, son capaces de actuar como cemento.

Este cemento impide que perdamos agua, ayudando a “rellenar” los huecos entre las células estructurando el estrato córneo, disminuyendo de esta manera la pérdida de agua, ayudando a reparar y mantener la función barrera y, en definitiva, aportando confort, flexibilidad, calma y suavidad a la piel. Por ello, la palabra emoliente se ha utilizado en muchas ocasiones como sinónimo de “calmante” o “suavizante”, ya que al mantener el estrato corneo compactado y cimentado, y evitando la perdida de agua, produce el efecto calmante. 

 

Esta cimentación de los corneocitos de la capa cornea por los productos emolientes, evita una mayor pérdida de agua, al estar mejor estructurada la capa cornea, por eso son hidratantes pasivos (no aportan agua, pero evitan su perdida).

Los productos emolientes se usan en loción, crema, ungüento o gel para prevenir o tratar la piel seca, áspera, con descamación o picazón, así como otros problemas de la piel, como sarpullidos o quemaduras.

Los cosméticos con propiedades emolientes ayudarán a calmar esta sensación y a aliviar los picores y rojeces en la piel. Si tu piel tiende a agrietarse o descamarse, sin duda necesitarás una crema emoliente para evitar los problemas de sequedad en la piel.

¿Qué diferencia hay entre una crema emoliente y una crema hidratante?

Algunos productos para el cuidado de la piel utilizan indistintamente los términos "hidratante" y "emoliente". La principal diferencia es que la hidratación se centra en retener el agua de la piel para evitar la pérdida de agua desde el interior, y otras aportan agua a la piel, mientras que la emoliencia se centra en mantener la barrera celular para conservar el agua en su interior.

Ambas cremas retienen agua:

·         Cremas emolientes una por estructurar la capa cornea y así funcionar correctamente

·         Cremas hidratantes sobre todo tienen moléculas higroscópicas que atrapan el agua, impidiendo que se pierda.

Uno de los emolientes más interesantes para la cosmética son los aceites vegetales naturales y las mantecas. La industria cosmética sustituye los aceites vegetales por los aceites minerales, siliconas...etc

En resumen:

·         Sustancias con composición grasa, A.V y mantecas

·         Suavizan la piel

·         Hidratantes pasivos, evita la perdida de agua

Restaura el manto hidrolipídico, y el cemento que une los cornecitos: Efecto calmante

martes, 29 de junio de 2021

Como convertir los gramos de una manteca a mililitros.

Cuando todos los componentes de nuestra fórmula cosmética son líquidos es fácil calcular el volumen final de la mezcla.

El problema surge cuando queremos mezclar mantecas que se presentan en estado sólido con aceites en estado líquido, entonces hay que hacer unos sencillos cálculos para saber el volumen final de nuestra mezcla. A continuación, te explico cómo hacerlo.